Cuando se piensa en lo perdurable aparece la pregunta, ¿qué es lo que debe perdurar?. ¿Cuáles son las condiciones para que un acontecimiento, una persona, una historia, una idea, una cultura sea perdurable? ¿Qué es digno de ser inmortalizado y cómo es inmortalizado? Estas ideas están en la base de la investigación y producción artística de Jorge Marín, en la que cuestiona legados históricos hegemónicos y pone de presente lo absurdo de la asimilación de unas herencias ajenas en la consolidación y construcción de un estado soberano. Estas sirven para evidenciar el fracaso de tales gestos totalizadores.
‘Gestos de gestas’ es un proyecto en el que Marín viene estudiando formas de representación pictórica y escultórica -basadas en cánones europeos- de próceres y notables del siglo XIX y principios del XX. A partir del estudio detallado de estas iconografías, el artista se vale de la fragmentación, la desaparición, el fuego, las veladuras, los tachones, las siluetas, como estrategias plásticas que buscan encontrar lenguajes y medios que aborden la perdida parcial o total del aura en estos elementos de representación nacional.
En palabras del autor, el recurso textual hace parte integral de su propuesta estetica; “el proyecto analiza el papel que ha tenido la palabra escrita en la construcción de una memoria histórica nacional, su poder y hegemonía desde el discurso, el relato o el emplazamiento público, borrando o blanqueando otros relatos y jerarquizando la Historia sobre otras historias, moldeando los ideales y creencias de una época y ayudando en la construcción de unos ideales y normas gubernamentales. La superposición de textos, la visibilidad de otros discursos y la intervención de material editorial son gestos que reflexionan sobre aquello que a sido y busca ser silenciado o blanqueado.”