Subtilis presenta un dialogo entre la obra de Andrés Monzón y Ramón Laserna, en el que, a partir de formalizaciones y lenguajes distantes, se propone una revisión hacia la visualidad como experiencia estética y hacia el regreso de la técnica en las prácticas artísticas contemporáneas, donde se hace evidente el marcado interés de ambos artistas por los procesos manuales, la experimentación con los materiales, la importancia en el hacer, y el conocimiento técnico en su producción artística. Todo esto, dentro del marco de procesos de creación basados en la búsqueda de la abstracción, entendida como expresión mínima de la representación.

Sobre el conocimiento de la forma y los materiales, en especial, la relacionada con los procesos de la cerámica, Andrés Monzón presenta una serie de esculturas que tienen origen en su investigación sobre la iconografía de la cultura Tumaco - LaTolita y Quimbaya Clásica-, donde, a través de la réplica de objetos y de la creación de esculturas zoomorfas, conoce y se apropia de esta tradición visual del norte de los Andes. Este lenguaje, al mismo tiempo se desplaza hacia la creación de una serie de bodegones que hacen referencia a la forma en que se disponen las frutas y verduras en los mercados, elevando este gesto de organización a un objeto escultórico monolítico, que formalmente hace referencia al trópico, al espacio público y a la orfebrería Quimbaya.

Bajo la premisa de la búsqueda por las formas sustanciales, Ramón Laserna se interesa en las geometrías lineales y reticulares visibles en infinidad de instancias de la vida cotidiana, y a partir de los conceptos básicos del dibujo, el punto, la línea y el plano, crea una serie de dibujos que son el resultado de un juego predeterminado de superposición de líneas, que se contrapone con una ejecución manual impecable, prueba de que el dibujo en su trabajo es una actividad meditada y pensante y lleva a una lectura donde la forma y la visualidad priman sobre la interpretación.