Noticias de ninguna parte
El ‘espacio profundo’ es la novísima última frontera del capitalismo híper avanzado. Las indagaciones espaciales ocupan hoy la primera línea de investigación y la recolección de datos sobre los confines de galaxias antiguas, los enanos rojos, o asteroides próximos y
lejanos, y se suman las creaciones imaginativas e imaginarias de todo tipo de fenómenos inexplicables.
¿Es posible despertar con un asteroide en la cama? Resulta que sí. Si hay alguien afuera, han sabido esconderse sin dejar alguna seña, pues como preguntó Enrico Fermi, “¿Dónde están?” Enviamos señales y no hay quien responda. Ante la guerra fría que se adelanta hoy por el dominio del espacio y sus recursos inexplorados, proponemos una conversación que busca identificar dinámicas, intensidades y
tensiones entre la obra de los artistas Jorge Barco, Radenko Milak y Juan Osorno.
Jorge Barco trabaja con el sonido como materia. Su obra opera dentro de un esquema de baja tecnología; recupera artefactos, tableros electrónicos y objetos que se utilizan para producir maquinas que exploran el universo sonoro de la fricción entre fragmentos de asteroides, entre otros fenómenos sensibles.
Dice Nazaré Soares: “En la obra de Jorge Barco encontramos un ejercicio de mediación que indaga en la ontología tecnológica y subconexiones con lo sonoro, la naturaleza, lo cósmico y lo humano. En el proceso de investigación de Barco se expresa una
persistente fuerza creativa que interrelaciona geología, ingeniería mística, ecología acústica y composición”.
Radenko Milak elabora en sus aguadas el mundo secreto de la ciencia, explorando imágenes de objetos de investigación de la NASA. Basándose en imágenes documentales, fotoperiodismo o archivos de propaganda, su practica artística pondera la formación del imaginario contemporáneo proveniente del flujo continuo e interminable de imágenes del mundo contemporáneo. El uso de imágenes recuperadas por grupos como ‘McMoon’s’, o de aquellas desclasificadas por el gobierno americano apalancan su investigación sobre las fronteras del conocimiento en el Antropoceno, minando la tecno-arqueológica que maravilla y aterroriza simultáneamente.
En la serie ‘El verano del cohete’ Juan Osorno explora las imágenes provenientes de la ciencia ficción. Mediante la recuperación y reconstrucción de películas de muy baja resolución, hoy archivadas en Blu-ray, el artista recrea los personajes de la primera ola de cine sobre ciencia ficción y fenómenos inexplicables.
Series televisivas como ‘The Twilight Zone’, realizada entre 1959 y 1964, alimentaron el imaginario popular ansioso de aproximarse a mundos para-normales y encuentros con seres de otros. En sus dibujos, explora los personajes creados bajo el temor de la guerra nuclear y las tensiones de la guerra fría. La serie de ‘Lotería Cósmica’ complementa el imaginario de eventos erráticos e impredecibles, simulando situaciones extremas producidas por objetos que caen del cielo.
El título ‘Noticias de ninguna parte’, de William Morris, hace referencia al placer del trabajo artístico, objetivo de los libertarios socialistas del siglo XIX. El libro se desarrolla en una proyección futurista, donde el personaje se despierta en el año 2000; pregona el retorno a la sencillez de la vida pastoral, la eliminación de las máquinas y la velocidad espasmódica; todos trabajan por el gusto de crear, como los artistas aquí propuestos.