Paciencia, disciplina, esfuerzo, concentración y constancia son palabras que sostienen la práctica artística de Rodrigo Spinel. Son conceptos y a la vez valores morales que aluden al trabajo duro y la dedicación a un oficio, reflejados en la atracción del artista por los objetos que exhiben labores intensas de repetición, como billetes y estampillas dibujados línea por línea en su matriz original, o en los muros construidos por la suma de cientos de ladrillos puestos uno a uno.
La figura del mampostero es un referente central en el que Spinel reconoce dichos valores, y con el que hace un símil entre el esfuerzo de construir un muro ladrillo por ladrillo, y la resistencia para construir un dibujo línea por línea. Como el mampostero, al repetir tantas veces el gesto sencillo de la línea recta, construye estructuras complejas en las que se evidencia inevitablemente el tiempo depositado en cada pieza.
Valor es otra palabra que aparece con frecuencia en su práctica. En la serie Currency se pregunta por el valor subjetivo que le damos a ciertos objetos, como una estampilla, un cómic, o una obra de arte, reproduciéndolos con su minucioso dibujo, y resignificándolos con el tiempo de cada línea. En la serie El papel moneda es blanco, expone el valor, tal vez perdido, de los símbolos que aparecen en los billetes, al dibujar fragmentos sobre la superficie.
La formación de Rodrigo Spinel como arquitecto se refleja claramente en su dibujo, cercano a los lenguajes de la planimetría y de las axonometrías, explorando las posibilidades volumétricas que aparecen en la acumulación de líneas como puede verse en la exposición individual Volúmenes de la Línea en La Balsa Medellín. Pero también en la forma de acercarse a un tema abstrayendo partes y examinándolas bajo una lente de aumento para encontrar los detalles.